La buena vida
Los gatos no tienen que volver a la Vida Slow porque nunca salieron de ella.
Entendiendo esto como un cambio cultural hacia la desaceleración, hacia una forma de hacer las cosas con tranquilidad, sin ser esclavo del reloj, ni de la agenda…ni de la comida rápida.
Disfrutando más de cada momento para así descubrir lo importante.
Como diría Henry: para saborear mejor todo lo que la vida nos ofrece.
Algunos consejos tomados de los felinos para llevar una vida slow:
-Dormir cada vez que haya ocasión.
-Desperezarse sin prisas, estirando el cuerpo con suavidad y firmeza.
-Comer lo más natural posible y sólo cuando se tiene hambre.
-Realizar actividades físicas moderadas y divertidas, correr, jugar, saltar, sin llegar a cansarse.
-Asearse despacio, mimando el propio cuerpo.
-Hacer una actividad después de otra, no varias al mismo tiempo.
-Y finalmente, enroscarse, ronronear, ponerse encima y demostrar cariño.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio